PSICOLOGÍA AFIRMATIVA GAY
Hoy quiero compartirte uno de mis rituales de inicio de año favoritos: elegir mi palabra faro. Yo descubrí este ritual tan potente para mí gracias a Paula Cabal, una amiga y compañera psicoterapeuta que es para mí uno de esos faros en la tormenta, tanto en lo profesional como en lo personal. Así que no se me ocurre mejor manera de explicarte en qué consiste este ritual que a través de ella:
“Una palabra faro es una palabra que nos guía. Todos necesitamos una guía, sobre todo en los momentos difíciles. Para elegirla, lo más importante es conectar con eso que más estamos necesitando y hacia dónde debemos dirigirnos, teniendo en cuenta nuestras necesidades más nucleares. Una vez elegida, busca una imagen que represente esta palabra, puede ser un dibujo, una fotografía, una figurita… Déjala visible durante todo el año, puedes tenerla en tu agenda o en algún lugar de tu casa o trabajo y ella te ayudará a tomar decisiones que sean coherentes con tus necesidades nucleares y no desde la emoción del momento (el miedo, las prisas, la emoción…). Por ejemplo, si tu palabra faro es “conciliación” te ayudará a proteger tu tiempo en familia, diciendo que no a algunos planes y proyectos a pesar de que estos sean ilusionantes o aparezca el miedo a perder ese tren (Cabal, 2022)
Para mí, la presencia siempre ha representado la capacidad de vivir en el momento presente, en el aquí y el ahora, con los pies sobre la tierra, el cuerpo asentado sobre el suelo y disponible para experimentar y navegar con mayor aceptación con lo que hay.
Sin embargo, mi palabra faro de este año quiero que represente otro tipo de presencia que empecé a experimentar en el último trimestre del año pasado. Se trata de una presencia como proclamación de uno mismo, de ser quienes somos de verdad. Esa presencia que arraiga al auténtico yo.
Me he dado cuenta de que la presencia también es:
- Estar y hacerte presente para ti mismo.
- Hacerte presente en los espacios que habitas.
- Quitarte la capa de la invisibilidad y alzar tu propia voz y visión de las cosas.
- Hacer presentes tus necesidades: qué quieres y qué no quieres, qué necesitas, qué te gusta y qué no te gusta, cómo te hace sentir tal cosa…
- Traer a la luz a esas partes de ti que aún permanecen en la oscuridad por vergüenza, miedos o inseguridades.
- Desenterrar los tesoros interiores de los que eres portador. Si están ocultos no pueden brillar.
- Encontrar y cultivar eso que te apasiona y te hace sentir vivo.
La presencia no es sólo que se enteren de que estás aquí. Es que tú mismo te enteres de que estás aquí. La presencia es «estoy aquí».
Paula nos recomienda que busques una imagen, un amuleto, un dibujo, un objeto… que represente tu palabra faro. El tenerla visible durante todo el año te servirá como recordatorio. Yo he escogido esta foto que inmortaliza una de esas primeras veces en las que empecé a conectarme con este tipo de PRESENCIA. La he puesto de fondo de pantalla en el ordenador y en el móvil. De esta forma, siento que mi palabra faro me estará acompañando más de cerca.
Si has llegado hasta aquí, te agradezco tu tiempo.
Nos vemos pronto, mochileros.
Un abrazo.
ANDRÉS ESCRIBANO 2023©
Aquí te ofrecemos un lugar seguro y especializado en PSICOLOGÍA AFIRMATIVA GAY en el que realizar tu proceso acompañado por psicólogos gais. Andrés Escribano. Psicología Afirmativa Gay.
